Estimados profesores, colegas, familiares y amigos
Hoy cerramos un ciclo, un camino que sin duda devela nuevos horizontes a nuestra practica como gestores culturales. Aquí no tan solo hemos trabajado académicamente, este lugar se ha convertido en un espacio de facilitación a nuestra práctica, en el hemos generado redes de apoyo entre nuestros colegas, quienes trabajamos en la ardua labor de gestionar cultura.
Hoy podemos analizar nuestro proceso formativo, llevamos con nosotros la consigna de que se puede y se debe gestionar independiente del lugar en el cual estemos desarrollando nuestra función.
Es sabido que trabajar en cultura no es un tema fácil de desarrollar, no basta con poseer un marco teórico apropiado para intervenir en las comunidades, se requiere de una sensibilidad que permita recoger el material semiótico de los demandantes, pues a través de sus signos y símbolos es que podemos intentar descubrir sus verdaderas necesidades. Somos servidores sociales que trabajamos con aquellos elementos significativos de las colectividades, por lo cual debemos ser responsables a la hora de realizar nuestra labor.
El tema cultural supone una herencia para las generaciones venideras, y quienes hemos optado por el camino de convertirnos en facilitadotes del proceso de construcción de identidades colectivas e individuales, somos los guardianes de estas representaciones.
Mas allá del tema administrativo, nosotros gestores culturales somos los representantes de un patrimonio humano tanto material como no material y insértanos en el oficio exige hacernos parte del lugar donde trabajamos, no solo de la posición de empleado si no mas allá, de la forma humana de generar vínculos con la institución y su gente.
Solo me queda agradecer, a mis profesores quienes supieron traspasar aquellos elementos que hoy para mi son herramientas concretas, a mis colegas con quienes he desarrollado las redes que perduraran mas allá del espacio académico, y a todas aquellas personas que día a día contribuyen con la configuración de mi practica. El tiempo pasa, lo que queda es la experiencia de un proceso compartido, hoy somos parte de la historia de este proyecto, de esta escuela pero lo principal es que formamos parte de cada una de las personas con las cuales trabajamos durante estos inolvidables meses y con los cuales seguiremos trabajando durante mucho tiempo. ●
Muchas gracias.
Verónica Tapia T.
Testimonio realizado en la Ceremonia de Certificación de la II Escuela de Gestores y Animadores Culturales
Que buena , no imagine nunca que lo pondrias en el blog, leerlo me remonta al Diplomado,mis compañeros y experiencias.Mis agradecimientos nuevamente por los conocimientos entregados, valorar y dignificar la labor del gestor cultural.